Curioseando, me he topado con este link, que habla de un estudio realizado por la empresa IAG Consulting sobre más de 100 proyectos tecnológicos realizados en Estados Unidos con presupuestos de 3 millones de dólares de media.
Una de las más importantes conclusiones de dicho informe es que el 68% de los proyectos tienen un éxito improbable.
Dicho de otra forma, es bastante habitual que 2 de cada 3 proyectos de IT terminen en fracaso.
No puedo evitar acordarme del documento conocido popularmente como Informe Caos (hay disponible una copia de dicho informe aquí), donde podía leerse que sólo el 16% de los proyectos terminan adecuadamente en tiempo y costes. Aunque fue realizado hace más de diez años, algo me dice que la situación no ha cambiado demasiado.
Aún estoy analizando el informe del estudio, pero a bote pronto se me ocurre dos grandes reflexiones:
- Hablando del sector en general, hay algo que las empresas tecnológicas aún estamos haciendo mal. Se requiere esfuerzos importantes en métodos y hábitos de trabajo que obtengan mejores productividades (eficiencia) y mejores resultados (eficacia), y no tanto desde la perspectiva de nuestra cuenta de resultados, sino desde la satisfacción del cliente. Un 68% de fracasos supone que 2 de cada 3 clientes no querrá saber nada más de nosotros al terminar el proyecto, lo que es un mal augurio de futuro de cualquier empresa.
- Uno de los mensajes más claros y rotundos de ambos documentos es que se necesita planificar mejor y analizar mejor. Esto entra en conflicto con querer ir demasiado rápido en busca de facturación de servicios y con soluciones pre-empaquetadas “café para todos“. Debemos escuchar más y pensar mejor. Y el primer punto de partida para ello es aplicarlo desde el primer momento: desde la misma reunión de toma de contacto y presentación de nuestros servicios.